lunes, 13 de abril de 2015

Disfrutando las vacaciones

He decidido disfrutar de las vacaciones en familia, lo que me ha permitido dedicarme al running sin estridencias y programar alguna pequeña escapada. Creo que mis hijos y especialmente mi mujer lo han agradecido y ha sido una buena válvula de escape de toda la vorágime creada alrededor del trabajo.
Para empezar decidí no forzar la máquina en los entrenos y evitar competir sin medida, que es la llave segura para una lesión. Eso no me impidió tener un poso de tristeza al ver a mis amigos competir en el fantástico trail Costa quebrada, que tuvo lugar el domingo de resurrección en los parajes alrededor de la fantástica villa de Liencres. Esta carrera con la que tengo una pequeña espina clavada pues ha sido testigo de 2 pajarones tremendos míos vio este año el triunfo de mi paisano y amigo Ricardo Lanza que en un trepidante 4,23 de promedio en una media maratón con unos desniveles brutales destrozó a Roberto Ruiz que venía de ser campeón regional de 10000 m y a Jose Luis gonzalez.




Me impresionó vivamente hablar con él tras la carrera, la seguridad que transmitía y el gran estado de forma que le hacen sin duda favorito de cara a la combinada del soplao. También en un toque más "Friqui" me encantó la ropa que llevaba puesta y ni corto ni perezoso me dirigía a la web buscando HOKO y descubriendo una marca española con unos diseños y calidades muy cuidados



Con lo cual como ya me conoceis, "piqué" y vía web me compré una equipación para larga distancia azul y me dispuse a probarla en una escapada de fin de semana que hice con mi mujer a la semana siguiente en Somiedo y en la que también pretendía quitar el polvo a la bici que ya tenía oxidada en el garaje.
Me encontré un paraje fabuloso con un tiempo excelente y tracé un ambicioso plan con el fin de disfrutar con mi señora, correr un poco y sobre todo sentir la naturaleza. Debo decir que mis ilusiones se colmaron con creces. El viernes un poco de trail running trasteando con la nueva equipación con unos resultados de comodidad altísimos, al final 1h35 minutos de subida por el monte desde Belmonte hacia Ondes, sintiendo el camino forestal bajo una fina lluvia y a ratos con sol. Imposible correr como los pro cuando el camino se empina pero al fin naturaleza en estado puro: fantásticas vistas desde arriba, incluida conversación con la gente del pueblo y luego vuelta tranquilamente por la carretera.




Al día siguiente tras un merecido descanso tocaba bici, elegí entre las múltiples alternativas que incluían las salvajes subidas a la Farrapona o San Lorenzo, una algo más realista pero también dura camino del puerto de Somiedo. Serían 18 km de subida sin grandes desniveles pero progresivamente más dura y con buen paisaje,....


Al final con mucho frío inicié la marcha desde la Riera no sin antes empezar con un mal presagio cayéndome de la bici nada más montarme. La senda inicialmente cómoda hasta Pola de Somiedo con mucho frío (4 ºC) pero con buenas sensaciones. A partir de Pola como ya me habían dicho en el hotel mucha dureza con desnivel medio del 7% mantenido varios km. Me quedo rápidamente sin piñones y voy centrado en mis pensamientos sin nada de tráfico, sol en el horizonte y el maravilloso sonido del río a mi lado. Llego a Caunedo y mejoro el ritmo que ya va sostenido hasta la cima. Preciosas curvas en herradura en La Peral y una larga recta que me lleva a la cima con la satisfación del deber cumplido. Al final casi sin entrenar y con el poso del running me he desayunado un puerto de primera categoría. Luego paseíto por la cima con la mujer y fin de semana redondo!! Bicicleta y running de la mano como buenos hermanos,....